Saltar al contenido
COLECCIONISTAS DE MONEDAS

Como hacer una Colección de Monedas en 2024

Actualizado 11 Ene, 2024 •reading-time 6-8'
Revisado por

Nota editorial: Este artículo se actualiza periódicamente para reflejar el valor actual de las monedas más valiosas.

En Coleccionistas de Monedas luchamos contra la desinformación que rodea al mundo de las monedas en la Red. Por esta razón nuestros artículos están escritos 100% por personas (no AI) y enlazamos a todas las fuentes y referencias de los precios de las monedas, para que tengas información real, actualizada y confiable.

Si acabas de aterrizar en el mundo del coleccionismo de monedas y te gustaría saber por dónde empezar, estás en el lugar correcto. En este artículo respondemos a preguntas habituales que nos hacéis llegar, tales como:

  • ¿Cómo puedo comenzar una pequeña colección de monedas?
  • ¿Qué monedas son más fáciles o más baratas para coleccionar?
  • ¿Qué monedas pueden tener más valor en el futuro?
  • ¿En qué debemos fijarnos para empezar a coleccionar?
  • ¿Cómo debemos guardar nuestra colección?

 

coleccion de monedas
Fuente: Pixabay

 

Aquí encontrarás algunos consejos y recomendaciones para que la entrada en el coleccionismo de monedas te resulte lo más fácil posible.

Por qué debes empezar a coleccionar monedas

En cierta manera el coleccionismo de monedas no es distinto de otros tipos de coleccionismo, tales como libros en sus primeras ediciones, relojes antiguos u otras obras de arte.

Si bien es cierto que cada persona posee una motivación diferente para coleccionar monedas, casi siempre suelen darse dos motivos principales:

  • el disfrute personal 
  • realizar una buena inversión.

Coleccionar monedas es mucho más divertido de lo que piensas

A la mayoría nos gusta tener nuestra colección de pequeños tesoros para poder enseñarlos, mirarlos y disfrutar de ellos cuando queramos.

En el caso de la numismática, mientras coleccionas monedas aprendes de historia, política o eventos y personas importantes. El propio afán por ampliar tu colección te lleva a interesarte por cuestiones históricas o sociales que son relevantes para la moneda en cuestión que estás comprando o vendiendo.

No pocos coleccionistas de monedas afirman que la pasión de las monedas les condujo a la pasión de aprender cosas nuevas.

¿Y qué decir además de la «caza del tesoro»? A todos nos emociona encontrar la moneda más buscada, la que encaja a la perfección en nuestro catálogo.

Tips para coleccionar monedas

Como decíamos, aunque tu motivación no sea exclusivamente lucrativa, si tu colección incluye monedas valiosas pronto te sorprenderás del aumento del valor de muchas de tus monedas.

Muchas personas además planean transmitir a su descendencia su colección de monedas, y eso redunda en un interés mayor por aumentar el número de monedas de la colección.

#1 Aprende el vocabulario (jerga) de los coleccionistas

Cualquier ámbito de carácter especializado posee un dominio semántico propio, y el coleccionismo de monedas no iba a ser distinto.

Son muy importantes lo siguientes términos:

  • Monedas en circulación / circulantes: son las que han sido utilizadas en el ámbito del comercio y han circulado con normalidad.
  • Monedas conmemorativas o de conmemoración: monedas que han sido acuñadas para honrar un evento, una persona, una institución o cierta emisión concreta. Este tipo de monedas son las llamadas monedas de colección y no están destinadas a ser monedas en circulación.
  • Valor nominal: se refiere al valor que aparece acuñado en la moneda. Nada que ver con el valor de la moneda dentro del coleccionismo.
  • Valor intrínseco: en este caso sí hablamos del valor real de la moneda. Usualmente este precio se basa en algunos factores considerado claves. Debe incluir:
    • lo que pagaste por ella.
    • el valor histórico.
    • su estado de conservación y belleza.
    • el año y la ceca de la acuñación.
    • su rareza.
  • Ceca: una casa de moneda o empresa que acuña monedas (por ejemplo, la FNMT española).
  • Acuñación: es el proceso de fabricación de las diferentes monedas.
  • Moneda de cuño: monedas emitidas en una acuñación determinada.
  • Numismática: disciplina de la ciencia histórica que abarca las monedas, billetes y medallas tanto antiguas como modernas.
  • Numismático: estudioso o coleccionista de monedas.
  • Prueba de acuñación: cada una de las primeras pruebas que se hacen de una acuñación, a fin de controlar la calidad del cuño. Son monedas de alta calidad que hoy día se hacen con mucha frecuencia, debido a la gran demanda que poseen entre los coleccionistas.
  • Monedas sin circulación: monedas circulantes que nunca lo han hecho.

Términos numismáticos sobre el aspecto o morfología de las monedas

En lo que se refiere al cuerpo de la monedas, existen una serie de palabras que hay que conocer:

  • Anverso: cara o lado principal de la moneda.
  • Reverso: la otra cara de las moneda; posee un carácter secundario.
  • Inscripción: se refiere al dibujo en relieve o tridimensional dentro del campo de la moneda.
  • Campo epigráfico: superficie plana en la que se graba la inscripción.
parte de una moneda
Fuente: FNMT
  • Campo numismático: superficie que va desde las leyendas del contorno de la moneda hasta el centro.
  • Borde o canto: es el borde exterior lateral que marca ambas caras de una moneda. Se la conoce como la «tercera cara de la moneda».
  • Gráfila: es la orla de las monedas y medallas. Suele ir unida al listel del borde, y se muestra de diferentes maneras: estrías, rayas, puntos, hoja, etc. Se cree que su función era la de proteger la moneda contra el desgaste y el recorte o limado.

#2 Empieza ya a coleccionar monedas

En muchas ocasiones se suele empezar o bien comprando monedas que te  “enamoran” o bien adquiriendo carteras o sets de monedas.

En este caso el criterio es bastante subjetivo. Puede ser el valor intrínseco de la moneda, su interés o los materiales con los que está hecha. Monedas de plata, de oro o de platino son muy populares. De este modo, un buen consejo es simplemente comenzar la colección adquiriendo monedas que despiertan tu interés.

Compra sets o carteras numismáticas

Es una muy buena forma de hacer crecer tu colección.

Una cartera o set es una pequeña colección de monedas de prueba o sin circular, emitidas por una institución de casa de monedas oficial. Este tipo de emisiones son realizadas con bastante frecuencia por prácticamente todas las cecas del mundo.

Al ser monedas que se encuentran en unas condiciones perfectas, se convierten en candidatas idóneas para engrosar tu incipiente colección de monedas.

#3 Encuentra tu tipo de colección

Una vez tengas las suficiente monedas notarás que existe un patrón, algo que las une a todas ellas. Ese algo es en realidad tu criterio, aquello que para ti es importante aunque no lo sepas.

Puede ser el estado de conservación, que abunden las de monedas de oro o las de plata, quizás el diseño, o el color. Cualquier cosa en realidad.

Aquí tienes una pocas ideas: monedas 5 pesos de colección, colección de monedas del Perú, colección de monedas americanas o mexicanas, etc.

Sea lo que sea, el hecho de darte cuenta de ello te permitirá:

  • Definir más específicamente el tipo de moneda que quieres coleccionar.
  • Crear sets de monedas por tipo.
colecionista de moneda
Fuente: Pexels

Ideas para empezar un tipo de colección

Son habituales los siguientes tipos de colecciones:

  • Fechas o años de cuño: las acuñadas en un año y país determinado. También puedes coleccionar una moneda concreta por cada año de acuñación.
  • País o zonas geográficas: te puedes limitar a tu país o coleccionar el mayor número posible de monedas del mundo.
  • Periodo de tiempo: es fascinante tratar de reconstruir un periodo de tiempo a partir de sus monedas. Ejemplos: Primera Guerra Mundial, Revolución Francesa, Independencia americana o acuñadas por los bandos de una guerra determinada.
  • Diseño: puedes tomar como criterio el tema. Animales, flores o plantas, eventos de carácter cultural, deportivos…  ¡el único límite es la imaginación!
  • Material / pureza: metales como el cobre o la plata, o incluso el oro si te lo puedes permitir, son ejemplos perfectos de colecciones por tipo de material.
  • Tipos de monedas: Circulantes, conmemorativas, bullion, de necesidad, provenientes de naufragio, reselladas, recortadas, tokens, falsas de época,…
  • Valores faciales: Tetradracmas, denarios, follis, dírhams, dos reales, 8 reales o “Duros”, escudos, thalers,…
  • Monarcas o gobernantes: Reyes Católicos, Reyes Egipto, Emperadores romanos,..
  • Monedas con errores de acuñación.

… y cualquier otro motivo que se nos pueda ocurrir.

Lo importante siempre es que te guste a ti y que seas tú el que sepa cuál es el motivo que sigue tu colección así como cuáles serían piezas esenciales para tu colección.

Siempre es un punto a favor no tener problemas con el idioma de la moneda. En otras palabras: si no vas a saber “leer” la moneda o tienes que aprender a hacerlo, mejor cambia de objetivo en tu colección.

coleccionar-monedas-nombre
Fuente: Numibids

Mente abierta

La razón por la que hay que ser flexible a la hora de coleccionar monedas es que tus intereses pueden variar con el tiempo. Si lo piensas, las personas somos así.

  • A lo mejor empezaste tu colección con la Segunda República Española, pero pasado el tiempo te das cuenta de que las que te interesan de verdad son las relativas a los cantones.
  • Empiezas una colección de monedas de oro, pero en unos años ves que las que te gustan en realidad son las que conmemoran cierto tipo de eventos, como por ejemplo los de carácter deportivo.

#4 El kit básico del coleccionista

Aunque el coleccionismo de monedas no requiere de una gran inversión en lo que se refiere a este tipo de accesorios, sí que son necesarias algunas cosas para:

  • Conservar correctamente la colección de monedas.
  • Disfrutar lo máximo posible de tu colección.

Con toda probabilidad, a medida que amplíes tu colección querrás accesorios más especializados y con más prestaciones.

Aquí tienes el kit básico para cualquier persona que aspire a coleccionar monedas:

  • Una lupa preferiblemente de 7 aumentos, para ver los detalles de las monedas.
  • Una regla o pie de rey para medir diámetros.
  • Un imán: cuidado con acercar mucho el imán a una moneda… ¡podría arañar su superficie!
  • Una forma de llevar el registro de tu colección, sea un cuaderno, fichas o algún tipo de programa de ordenador.
  • Álbumes para tener todas las monedas centralizadas y ordenadas en un lugar.
  • Hojas, cartones o cápsulas para mantener tus monedas más valiosas a salvo de condiciones ambientales adversas. Protégelas sobre todo de la humedad y el polvo. Son los mayores enemigos de los coleccionistas de monedas.
  • Unos guantes de algodón para tocar las monedas.
  • Una guía de referencia para conocer información importante de tus monedas.

#5 Conserva y cuida tus monedas

Este punto es más importante de lo que parece, ya que el estado de conservación de las monedas es uno de los aspectos cruciales de su valor.

Aquí tienes unos consejos básicos para hacer las cosas bien:

  • Nada de tocarlas con las manos desnudas, solo con guantes. Aunque te laves las manos, la grasa de la piel daña la moneda y, por ende, su valor disminuye. Recuerda: usa siempre guantes de algodón.
  • Evita guantes de latex o plástico. Estos guantes suelen venir lubricados con productos que puede producir daños irreparables en las monedas.
  • Manipula correctamente las monedas: siempre por los bordes, y con los dedos índice y pulgar. Recuerda que el campo de la moneda es sagrado. No se debe tocar nunca. Si temes que se te pueda caer coloca debajo una toalla o un trapo grueso lo más mullido posible.
  • Cuidado cuando hables: aunque parezca mentira la saliva es un gran enemigo de las monedas, pues puede crear manchas irreversibles.
  • Almacena y muestra correctamente y de forma segura tu colección de monedas. Si eres principiante puedes guardarlas en fundas o sobres de papel (libre de ácidos). También dispones de tubos, carpetas o álbumes. Para las más valiosas usa cápsulas selladas de plástico duro.
  • Piensa si deberías incluirlas en tu seguro de hogar, o de robo. Es un aspecto que deberías valorar de cara al futuro.

Cómo conservar nuestras monedas de colección

Un elemento a tener en cuenta es la forma en que vas a guardar tu colección y el espacio del que puedes disponer para ello.

Lo más económico son los álbumes de monedas preparados para albergar las monedas sin más. Si quieres un extra de protección puedes usar cartoncitos para guardar la moneda y comprar álbumes preparados para esos cartoncitos. Además puedes apuntar en ellos algunos datos de la moneda.

como-empezar-a-coleccionionar-monedas-cartoncillos
Fuente: Google Images

Una de las opciones más elegidas por los coleccionistas son las cápsulas y, dentro de esta opción, en concreto las cápsulas quadrum intercept, probablemente las mejor consideradas. También hay álbumes con hojas especiales para estas cápsulas que quedan muy bien, aunque la forma más habitual es presentarlas en bandejas.

conservar-monedas-valiosas-quadrum
Fuente: Google Images

El uso de monetarios encarece más el mantenimiento de nuestra colección, si bien es una presentación muy bonita. Existen monetarios de plástico -más baratos- o de madera. Y en función de las condiciones atmosféricas que rodean a la colección se puede optar por un monetario donde estén las monedas al aire libre, protegidas con cápsulas o con las capsulas intercept.

como-guardar-monedas-de-coleccion-monetario
Fuente: Amazon

#6 – Enamórate de tu colección 

Pensamos que el mejor consejo que se puede dar a la hora de comenzar una colección de monedas es elegir un motivo o temática que nos guste tanto como para estudiar e indagar todo lo que podamos sobre ello.

Hay coleccionistas que a los pocos años de coleccionar cambian la temática de su colección. Es algo normal y habitual, ya que conforme se van conociendo más aspectos de nuestra colección y otro tipo de monedas se suelen dar giros o ampliaciones de la colección inicial.

Pero siempre debe ser algo que nos apasione y nos guste. El coleccionismo de monedas deja de ser un hobby cuando lo hacemos por rutina o por obligación, cuando nos obsesionamos con una pieza en concreto que nos falta y nos impide disfrutar de las que tenemos.

#7 – Empieza con monedas baratas

Se debería empezar por adquirir monedas de valor bajo ya que por falta de nuestra experiencia podríamos equivocarnos o incluso decidir dar un rumbo distinto a nuestra colección nada más empezar. También es habitual intentar conseguir muchas piezas para nuestra colección sacrificando calidad en las piezas.

Para evitarlo es conveniente llevar un buen seguimiento de la oferta existente en el mercado numismático para poder conocer de primera mano cuáles son, dentro de nuestros gustos y posibilidades, las monedas que más se ajustan a lo que buscamos.

Siempre que te sea posible hazte con un catálogo de casa de subastas. La razón principal es que normalmente recopilan monedas de distintas épocas y países con precios de salida y estimaciones, lo cual es de gran ventaja a la hora de averiguar precios de monedas de colección.

Además las fotos del catálogo suelen ser a tamaño real de la moneda, por lo que te puedes hacer una idea del diámetro de las mismas. Esto no puedes hacerlo en internet, por ejemplo, donde las imágenes de las monedas tiene el mismo tamaño.

#8 – Evita comprar falsificaciones: Cuidado con las monedas falsas

Está claro que la única manera de que no te cuelen una moneda falsa es conociendo perfectamente las monedas que coleccionas.

Por ello es vital poder verlas en mano además de en catálogos o en la web.

Siempre que puedas asiste a convenciones numismáticas, tiendas numismáticas, pregunta a colegas que ya estén iniciados y te puedan servir un poco de guía.

Además siempre puedes hacer una primera comprobación a la moneda en función del peso teórico que debería tener, el diámetro, la composición del metal del que está hecha la moneda, comprobación de fechas, ensayadores/grabadores, etc. Para determinados tipos de monedas también pueden estar disponibles libros y catálogos de monedas falsas.

Factores clave del coleccionismo de monedas

Queremos darte algunas ideas para que tú mismo valores ventajas e inconvenientes de cada una y puedan ayudarte a elegir por dónde comenzar tu colección de monedas.

  • Presupuesto: Una de las primeras cosas que debes plantearte es la cantidad de dinero (mensual o anual) que vas a destinar para adquirir piezas para tu colección. Este punto es muy importante, ya que el hecho de enfocarte en  unas pocas piezas caras compradas una o dos veces al año puede derivar en que pierdas el interés por tu colección, sobre todo al principio. Destinar tu dinero a piezas más baratas, bien por ser muy comunes o por tener peor conservación, hará que puedas adquirir más piezas y ver como aumenta tu colección rápidamente. Esta forma de comenzar a coleccionar es más frecuente de lo que parece. De hecho muchos coleccionistas novatos empiezan a comprar compulsivamente piezas baratas y más adelante buscan mejorar esas mismas piezas pero en mejor conservación. En este caso deben volver a destinar más dinero en esas piezas mejoradas, pero con la diferencia de que poseen mayor conocimiento de este tipo de monedas.
  • Profundidad vs calidad: Intenta decidir con antelación si prefieres darle a tu colección profundidad (con gran cantidad de piezas en calidad baja) o centrarte en buscar calidad (menos piezas pero mejores).
  • Monedas escasas vs populares: Otro aspecto clave es la amplitud de la oferta de piezas que tienes a tu disposición para comenzar tu colección. Es decir, si son monedas fáciles de encontrar en tiendas, webs, subastas, etc o por el contrario se encuentran a la venta en ocasiones contadas. Por ejemplo: es muy distinto centrar tu colección en conseguir todos los años de los centavos de Lincoln de los Estados Unidos de América, de los que puedes encontrar millones y millones de piezas y elegir las mejores calidades que puedas conseguir según tu bolsillo que, por el contrario, basar tu colección en las acuñaciones pompeyanas en Hispania, difíciles de encontrar y con poca rotación en el mercado.
  • Documéntate: es muy aconsejable que puedas contar con documentación básica de lo que vayas a coleccionar como catálogos, webs de referencia, foros, blogs, etc. Hoy día en internet existen todo tipo de webs y blogs más o menos especializados en distintas materias. Se pueden encontrar webs que nos pueden servir como catálogo para ver las monedas que tenemos y las que estamos pensando adquirir. Y también foros y blogs donde poder descargarse gratuitamente catálogos y libros. Por ejemplo, en el siguiente enlace puedes encontrar de forma gratuita uno de los mejores catálogos de moneda española. De hecho te aconsejamos que a la vez que te vas documentando valores también con qué catálogos o libros puedes contar de forma gratuita y con cuáles no, ya que también deberás destinar parte de tu dinero en adquirir catálogos o libros más actualizados o especializados sobre la colección que vas a comenzar. Por ejemplo, vamos a encontrarnos mucha documentación gratuita más o menos profunda sobre moneda romana, por ejemplo, que sobre moneda resellada española del siglo XVIII y XIX.
coleccionismo-de-monedas-de-2-euros
Fuente: Coleccionistasdemonedas.com

Qué hacer con tus monedas heredadas

De repente llega a tus manos una colección de monedas y no sabes qué hacer con ellas? Merece la pena venderlas? Cuál es su valor? En este artículo te aclaramos qué hacer con tus monedas y dónde y cómo puedes venderlas para obtener el mayor valor en el mínimo tiempo posible.

Continuamente nos están llegando consultas sobre monedas que nuestros lectores encuentran en algún cajón en casa de algún familiar, que les regalaron hace tiempo o de alguna colección que han heredado.

De hecho son muy frecuentes consultas sobre valoración de monedas en los comentarios de coleccionistasdemonedas.com, foros, grupos de facebook, blogs, etc. Y no solo son preguntas sobre el valor de las mismas sino también dónde poder venderlas para obtener el mejor precio por ellas.

Si este es tu caso, sigue leyendo, porque en este artículo vamos a intentar responder a todas estas preguntas.

Lo primero: ¿Qué quieres hacer con tus monedas?

Generalmente las opciones que se plantean giran en torno a estas tres decisiones:

  • Hay personas que desean conservarlas guardadas para que pasen a la próxima generación.
  • En otras ocasiones estas monedas son el comienzo de una colección que va a tomar forma con el tiempo. En nuestra opinión esta opción es la más recomendable. 
  • Resulta muy habitual que se busque obtener un beneficio rápido con su venta. En este artículo vamos a centrarnos en esta última opción e intentaremos aconsejarte lo mejor posible para que obtengas el máximo beneficio por la venta de tus monedas heredadas.

¿Dónde puedes vender tus monedas?

Las opciones son muy variadas y debemos tener en cuenta todas ellas con sus pros y sus contras.

Venderlas a la tienda de numismática de nuestra ciudad

En este caso podemos obtener la ventaja de que el numismático puede orientarnos sobre las piezas que tenemos, a la vez que sus precios de mercado. Pero hay que tener en cuenta que si nos las compra lo va a hacer a un precio muy inferior al de mercado ya que:

    1. Deberá venderlas todas (sin saber cuánto tiempo le llevará recuperar su dinero invertido) y
    2. Además obtener algún beneficio por el riesgo que asume.

Acudir a una empresa de subastas numismáticas

Si tenemos un número elevado de piezas podríamos intentar consignar nuestras piezas en alguna casa de subastas: nos pedirán fotos de las piezas, o de algunas de ellas, para poder hacerse una idea de tipos de monedas y calidades medias. Pero no siempre van a querer todas las piezas para sus subastas, ya que generalmente las de poco valor no le interesarán. Vender nuestras piezas en una subasta (una vez la casa de subasta las haya aceptado) no nos garantiza que puedan llegar o superar el precio de mercado ya que los precios de salida suelen ser inferiores a los de mercado. Además, la casa de subastas nos va a cobrar una comisión del montante por el que se vendan nuestras monedas. Por lo que debemos preguntar siempre por la comisión que cobran a los vendedores.

Venta a un coleccionista

Puedes vender tu mismo las piezas en la web, por ejemplo en eBay (que también te cobrarán un porcentaje por venta) o en grupos de Facebook  -cada vez están más activos-, ahorrándonos en este caso la comisión.

Antes de vender, conoce su valor

Ahora bien, para poder saber si el precio que pedimos o esperamos obtener es el precio de mercado resulta esencial que identifiquemos algunas de nuestras monedas. Y lo ideal es que lo tengamos claro antes que ejercer algunas de las opciones anteriores, aunque ello nos supongo invertir algo de nuestro tiempo.

A continuación algunas preguntas que debes hacerte a ti mismo para saber algo más de las monedas que quieres vender.

  • A quien pertenecía antes esa colección de monedas? Esta pregunta va a aclarar muchas cosas. Y para ello es fundamental que no te engañes a ti mismo y hacerte las siguientes reflexiones. Si la persona a la que pertenecía antes era coleccionista podría tratarse de alguna moneda valiosa de su colección que guardó en su día, pero que por nuestro desconocimiento de la materia no adivinamos qué tiene de especial. Evidentemente si esa persona no era coleccionista pocas posibilidades tenemos de tener en la mano una pieza valiosa o escasa entre todas las que hemos heredado.
  • ¿Cómo han llegado esas monedas a tus manos? Es importante saber el por qué tenemos esa moneda en concreto. ¿Acaso la persona que la tenía antes viajaba y esa moneda procede de algún viaje? ¿Es una moneda contemporánea a la persona que la tenía antes? Las respuestas a estas preguntas pueden desvelar si la moneda es de colección o simplemente un souvenir o una moneda falsa. Si fue una moneda que circuló en su día y simplemente estaba en la cartera, pantalón o un cajón esperando a ser usada en algún pago o como calderilla.
Ejemplo moneda falsa
Ejemplo de moneda falsa deteriorada por el tiempo. Fuente: Coleccionistasdemonedas.com
  • ¿Se trata de una moneda aislada o de una colección? ¿cómo estaban guardadas? Otra pista importante es la forma en la que nos han llegado las monedas. Hemos visto fotos de muchos tipos de conservación: monedas guardadas en cajas o tarros (como la foto que ilustra este artículo) y también monedas guardadas en plásticos, fundas, álbumes e incluso cápsulas.

 

Coleccion completa quarters
Colección completa de Quarter dollars bien guardada que pudiera poseer valor. Fuente: Coleccionistasdemonedas.com

El estado de la moneda, una de las claves

Ni que decir tiene que, por norma general, mientras mejor sea el medio utilizado para guardarlas mayor será la probabilidad de que las monedas tengan más valor.

Para un coleccionista un conjunto de monedas en cajitas o botes es sinónimo de desgaste, golpecitos en las monedas, oxidaciones, es decir: todo lo que no queremos que se de en una moneda para que sea valiosa.

Sin embargo una presentación cuidada, en orden, suele indicarnos que por lo menos para el propietario anterior eran monedas valiosas. Pero ojo, este hecho no siempre implica que se trate de monedas valiosas para todo el mundo, ya que no todos los coleccionistas centran sus colecciones en piezas valiosas y caras.

 

ejemplo de moneda catalogada
Columnario graduado y encapsulado por PCGS de alto valor económico. Fuente: PCGS

Consejos para conocer el valor de una colección de monedas heredada

En muchos casos mirando las dos caras de las monedas vamos a conseguir saber datos fundamentales como son:

  • Material,
  • País,
  • Fecha
  • Valor Facial.

Aunque parezca increíble con estos datos ya tenemos gran parte del trabajo hecho puesto que podemos acudir a internet, poniendo en un buscador los principales términos que hemos leído en la moneda.

En www.coleccionistasdemonedas.com contamos con artículos específicos sobre cada tipo de moneda con sus precios actualizados.

Puede darse el caso en que no sea posible obtener estos datos por tratarse de monedas de la época antigua o por ser monedas en un idioma que no dominamos. En este caso también podemos obtener algunas pistas como diámetro, el peso y el material del que están hechas.

Ejemplo moneda catalogada
Ejemplo de moneda catalogada. Fuente: Coleccionistasdemonedas.com

Cómo averiguar sus medidas, peso y material

Con una sencilla regla puedes medir el diámetro, y una báscula de cocina te servirá para saber el peso. Un imán te permitirá conocer el metal principal de tu moneda. Con la ayuda de un imán descartaremos las piezas que parezcan de plata u oro y que se peguen al mismo y podremos encuadrarlas en monedas de otros metales menos nobles o de aleaciones modernas, probablemente.

En la mayoría de los casos nos vamos a encontrar con monedas de colores irisados, dorados, plateados o de color cobrizo que podrían corresponderse con monedas de oro, plata y cobre.

Otro truco que funciona a veces es utilizar buscadores de imágenes similares, por ejemplo Google Lens, con tu moneda. Quizás no aparezca la misma pero si alguna de un país o monarca similares. Lo justo para poder encuadrar tu moneda en un período histórico o geográfico si no puedes ver fecha o país.

Ya he clasificado mi moneda… ¿ahora qué?

Teniendo una noción de lo que tenemos delante llegamos a un punto en el que debemos elegir entre varias opciones:

  • Hacer fotos del conjunto de piezas que tenemos y subirlas a algún foro o grupo de facebook esperando que alguien nos diga si tiene valor y cuánto. Lo que puede derivar en recibir ofertas privadas simultáneas para comprar nuestro lote.
  • Utilizar buscadores de monedas como por ejemplo https://www.acsearch.info/ en los que se necesitan muy pocos datos para ver fotos y fotos para encontrar las más parecida a las nuestras.
  • Consultar agregadores o indexadores de subastas de monedas: en ellos puedes consulta qué precios de salida tienen monedas similares a las tuya, y algunas veces verás sus precios de martillo.

A modo de conclusión

Lo mejor es no precipitarse en comprar piezas o en tomar la decisión de por dónde empezar a coleccionar monedas. Mira, lee, navega, escucha consejos, utiliza toda la bibliografía que puedas tener a tu alcance y pregunta a algún coleccionista veterano que conozcas antes de aventurarte con alguna serie.

Merece mucho la pena dedicar un tiempo prudencial a identificar y valorar tus monedas. Recuerda siempre que una vez vendidas no sirven de nada los lamentos. Investigar y tomar una buena decisión con tus monedas será el camino más fiable y sencillo con el que obtener un mayor beneficio con la menor inversión de tiempo y dinero.

Reflexiona sobre la cantidad de dinero que puedes destinar a esta bonita afición y planifica el número de monedas que podrías adquirir en el corto/medio plazo. Invierte en bibliografía cuando sea imprescindible y sobre todo hazte pronto con una lupa y una báscula como primera inversión.

En muchas ocasiones las colecciones de monedas se heredan de padres a hijos. Si hay un coleccionista en la familia, es muy probable que trate de inculcar su pasión a sus propios hijos o nietos. Son muchas las colecciones de monedas familiares que han crecido a lo largo de los años gracias a la labor de diferentes generaciones. 

Si tenemos la suerte de poseer una colección de monedas y/o billetes en nuestra familia, es muy probable que la persona que  la comenzó la enriqueciera con monedas interesantes y valiosas. Dichas colecciones pueden tener décadas o incluso siglos. Y se sabe que el valor de las monedas bien conservadas puede haberse disparado durante este tiempo. A veces vale la pena pararse a estudiar con detenimiento las colecciones de monedas familiares.

Coleccionar monedas es algo diferente e intrigante: detrás de cada pieza se oculta una historia a menudo increíblemente sugestiva y digna de ser descubierta. Una vez se prueba se convierte en una pasión que permanece con nosotros el resto de nuestras vidas. Esa propia naturaleza de explorador que todos llevamos dentro enciende el deseo de enriquecer nuestras colecciones con monedas valiosas y especiales. El coleccionismo de monedas puede llegar a ser más que un pasatiempo o una forma de invertir tu dinero. Con el tiempo puede que esa colección de monedas que has logrado reunir a lo largo de tantos años sea un legado que ocupe un lugar muy destacado en tu vida.

Fuentes y referencias

Otros artículos relacionados que te pueden interesar: